Martes 19 JULIO
21:00 h.
Coppel & Jairo Martín
COPPEL. El músico bilbaíno comenzó a rasguear la guitarra con 15 años y con 20 empezó a escribir canciones. A Madrid llegó hace 13 años con la sana intención de dedicarse a la música y desde entonces ha publicado cuatro discos: Perdón por existir, (2007), El hombre que mató a íñigo Coppel, (2010), En el Olympia,(2014) y Los nobles Salvajes, (2016). En éste último disco, cuyo título inspira una frase de Jacques Brel, recorre su imaginario personal atravesando ecos de autores como Bob Dylan, Carlos Gardel o Javier Krahe.
Desde la crítica musical se ha comentado: "Entre tantos aspirantes insípidos a "songwriters" como estamos acostumbrados a soportar, la decisión tomada por Iñigo Coppel de adoptar un registro más cercano al juglar libertario e irreverente, resulta mucho más apetecible" "Da igual si envuelve sus magníficas y originales letras en chanson francesa, en folk o en music hall, sale airoso y vencedor en todas las batallas. Pocos pueden afirmar lo mismo".
JAIRO MARTíN. Pianista, guitarrista, compositor y cantante nacido en Icod de los Vinos, Tenerife, y madurado en el Barrio de las Letras en Madrid. Después de una larga experiencia en diversas bandas, Jairo Martín publica su primer disco en 2008, LA FIESTA CREPUSCULAR (autoeditado). En 2013 publica su segundo disco, APUNTES DE OTRO TIEMPO (Hipnótica Records). HOMBRES MEJORES (El Escondite Producciones, 2016) es su tercer álbum. De 2018 es ¡Sí! (autoeditado), un disco en el que ejerce de productor, cantante y multinstrumentista del reconocido autor Alberto Urrutia, letrista de muchos de los éxitos de Gabinete Caligari. Casi finalizando el año 2018 graba en directo en Madrid LA RESISTENCIA BOHEMIA.
Ha participado en conciertos y grabaciones de Rafael Berrio, Jaime Urrutia, Ariel Rot, Rubén Pozo o La Unión.
Jairo Martín mezcla la noche madrileña con los amaneceres canarios en un conjunto de canciones herederas del mejor rocanrol tabernario. Transita cual juglar medieval por las vías del viaje al final de la noche, ese negociado por el que Cohen y Dylan han navegado siempre.