Viernes 11 ABRIL  

 01:00 h.
Don Mauro

Actor, pianista y compositor, es un humorista que ha consolidado una amplia experiencia como monologuista, a lo largo de varias temporadas, con los espectáculos: Concierto... sentido del Humor, Tócate los cojones, Tócate los 2 cojones, Historias de la noche contadas de madrugada (monólogos cómicos con música que se estrenó en la sala Clamores de Madrid), así­­ como actuando en diferentes Salas-Espectáculo y teatros con PARAMOUNT COMEDY y Noche de cómicos de EL CLUB DE LA COMEDIA.

Ha compartido escenario con los más reconocidos humoristas de la escena nacional.
Comenzó su carrera artí­stica como pianista compositor y arreglista de diferentes grupos de música. En el año 2000, compone y graba un disco en solitario, SEVEN, que es comprado por la discográfica Peoplesound.com, disponible actualmente en la página web de la discográfica.

En el campo audiovisual, colabora como actor cómico en diferentes programas del canal temático PARAMOUNT COMEDY de la plataforma digital, Digital Plus. Presta su imagen y vis cómica a promociones comerciales y promociones audiovisuales de programas de televisión.

Los trabajos que ha realizado en las televisiones de ámbito nacional han sido en ANTENA 3 Televisión como 'Vigilante de la tele', programa presentado por Manu Carreño y en TELEVISION ESPAí‘OLA en el programa Carta de ajuste, con Jose Marí­a Iñigo y Minerva Piquero.

A Mauro Muñiz, de pequeño, sus papás le apuntaron a solfeo. Y ser el niño rubito que va a música... es algo que te deja marcado para siempre, claro. Porque sí­, tus compañeros de clase te llaman nena. Mauro bajaba la cabeza y claro, tanto acumular mala leche no podí­a ser bueno. Y ahí­ apareció Don Mauro. Y enseguida empezó a malmeterle: que si puestos a tocar el piano que se dejara de la mierda del Chopin... y Mauro terminó siendo teclista de La Cabra Mecánica; en el disco 'Cabrón', para más señas. Pero no era suficiente: la úlcera de Mauro crecí­a a marchas forzadas y... cada vez era más difí­cil controlar a Don Mauro. Asi que... decidió dejarle suelto, qué coño. Y de perdidos, al rí­o: que se subiera a un escenario y dijera desde allí­ todo lo que A EL LE ESTABA REPUDRIENDO POR DENTROOOOO... JODERRRR!!!
Y bueno, el resto es historia.